El mantenimiento de suelo radiante y la limpieza de este son dos asuntos muy importantes, y que debes conocer a la perfección para no dañar la instalación. Ahondar en este contenido es imprescindible, sobre todo, si tienes un suelo de este tipo.
En HogarSolar queremos que conozcas toda la información al respecto sobre el mantenimiento y la limpieza de los suelos radiantes. No queremos que tu sistema se vea afectado por un uso inadecuado.
¿En qué consiste el mantenimiento de suelo radiante?
Primeramente, vamos a hacer una aproximación al mantenimiento del suelo radiante hablando sobre en qué consiste esta acción de forma concreta. El mantenimiento del suelo radiante consiste en revisar periódicamente el sistema para garantizar que funcione correctamente, y evitar de esta forma que aparezcan cualquier tipo de problemas relacionados con las obstrucciones y fugas. Además, también es imprescindible para asegurar una distribución uniforme del calor.
Mantenimiento suelo radiante: aspectos a tener en cuenta
Dentro de los aspectos más importantes a tener en cuenta sobre el mantenimiento del suelo radiante, podemos destacar parámetros como el de la presión, que debe mantenerse dentro de los valores que recomienda el fabricante.
También, hay que prestar especial atención al aire acumulado en las tuberías, a los sedimentos y a los residuos que pudieran estar presentes. Además, también durante el mantenimiento se revisa la caldera o la bomba de calor, que son las encargadas del buen funcionamiento, y se controlan las fugas de agua que pudieran aparecer.
Problemas del suelo radiante si no haces un correcto mantenimiento
A decir verdad, el mantenimiento de este tipo de suelos no es un asunto baladí, y es que si no llevas a cabo un mantenimiento periódico pueden aparecer numerosos problemas, que van a comprometer la eficiencia y eficacia de todo el sistema.
Algunos de los problemas más habituales en este sentido, y que se pueden evitar con un correcto mantenimiento son los siguientes:
- Reducción de la eficiencia energética.
- Obstrucciones en las tuberías.
- Desgaste prematuro del sistema y averías costosas.
- Problemas de confort térmico.
Mantenimiento suelo radiante: tipos más habituales
Aunque hablemos del mantenimiento como un todo, de forma más específica, dentro de dicho mantenimiento existen diferentes tipos. Cada uno de ellos se centra en una serie de aspectos, y es importante que los tengas claro. Los tipos de mantenimiento que debes conocer son: mantenimiento preventivo y mantenimiento correctivo.
Mantenimiento preventivo
El mantenimiento preventivo es el que se encarga de llevar a cabo revisiones periódicas para evitar problemas futuros en todo el sistema. Podemos decir que este es el mantenimiento que debes realizar de forma regular.
En este, se lleva a cabo una comprobación completa de la instalación, el vaciado del circuito o una limpieza de conductos con agua a presión, entre otras actividades.
Mantenimiento correctivo
Por otro lado, el mantenimiento correctivo está más enfocado a la posterioridad. Este consiste en la reparación de averías o problemas puntuales que puedan surgir en la instalación, como fugas o bloqueos.
¿Cómo llevar a cabo el mantenimiento del suelo radiante?
Para llevar a cabo el mantenimiento del suelo radiante hay que revisar la presión del sistema, en este paso el técnico se preocupará de que se encuentre en los niveles recomendados. Después, en el momento de purgar para eliminar el aire acumulado a través de válvulas.
El siguiente paso tiene que ver con limpiar las tuberías. Para ello, es habitual que utilicen productos antical, sobre todo, si hay acumulado algún tipo de residuo. Posteriormente, el profesional en cuestión va a inspeccionar la caldera o la bomba de calor, así podrá verificar que funciona de forma adecuada. Y, por último, tendrá que observar si hay algún tipo de pérdida de agua para controlar una determinada fuga.
¿Cómo realizar una correcta limpieza de suelo radiante?
En cuanto a la correcta limpieza del suelo radiante, podemos decir que debe realizarse de la siguiente manera y que está dividida en dos pasos principalmente:
- Limpieza con agua a presión: en este primer paso, se introduce agua a alta presión en las tuberías para eliminar sedimentos.
- Limpieza química: después, el momento de aplicar productos desincrustantes para eliminar la cal y los residuos acumulados que pudieran estar en peores condiciones.
Si con esto no es suficiente, se recomienda la utilización de equipos especializados para tratar de llevar a cabo una limpieza más profunda y efectiva.
¿Cada cuánto tiempo hay que realizar una limpieza o mantenimiento del suelo radiante?
Para terminar, es importante que sepas que la frecuencia para el mantenimiento y limpieza del suelo radiante va a depender principalmente del uso y de las características de cada sistema. No obstante, de forma general, se recomienda realizar un mantenimiento preventivo, al menos, una vez al año. Del mismo modo, la limpieza de tuberías debe realizarse cada dos o cada cinco años, y, finalmente, la revisión de los componentes del sistema, también de forma anual. De esta forma, estamos convencidos de que vas a poder prolongar la vida útil de tu instalación.
En resumen, el mantenimiento y la limpieza de los suelos radiantes es muy importante. En HogarSolar hemos querido darte las claves para que no tengas ningún problema con este sistema. ¡La prevención es muy importante!