Los inversores solares se consideran un componente clave de una instalación fotovoltaica. Si no fuese por este elemento, no podríamos aprovechar la energía que viene a través de la energía de los rayos del sol.
Como es un componente algo complejo de entender, hemos dividido este artículo en diferentes apartados. Así podrás comprender qué es y cómo funciona.
¿Para qué sirve un inversor?
Si quieres aprovechar la energía que llega desde la placa solar para hacer funcionar tu ordenador, tu lavaplatos, nevera, horno o cualquier otro tipo de electrodoméstico, es crucial contar con un inversor solar.
Con independencia del tamaño que tenga la instalación solar, tanto si es grande como si es pequeña, nos hará falta un inversor. Ahora bien, es cierto que pueden ser diferentes en base a ciertas variables (por ejemplo, si son híbridos (permiten baterías), en función de la tensión de la red (monofásicos o trifásicos) y de la potencia del campo solar).
Estas son las principales funciones de un inversor solar:
- Conversión de la energía: su principal uso es convertir la corriente continua en corriente alterna. Esta última es la que necesitan los equipos eléctricos actuales.
- Optimización de la energía: otro de sus usos es la de optimizar al máximo la energía que llega desde las placas solares. Lo consiguen ofreciendo un cierto aislamiento a los paneles de forma individual, lo que permite conseguir que la producción de energía sea mayor y, al mismo tiempo, mejora el rendimiento global de la instalación.
- Monitorización: estos sistemas también contribuyen a hacer un seguimiento del rendimiento energético del sistema fotovoltaico, de toda la estructura de la actividad eléctrica y de las señales que se producen cuando el sistema está dando problemas, o los va a dar.
¿Qué es un inversor solar fotovoltaico?
Estamos hablando de un inversor de corriente; es un elemento que tiene el objetivo de transformar la energía que llega a través de las placas solares en energía que podemos aprovechar en nuestro día a día. Son dispositivos que han sido concebidos para conseguir el máximo rendimiento posible de los paneles solares fotovoltaicos.
Recordemos que la función que tiene una placa solar es recibir los rayos del sol, pero tienen el problema de que se obtiene energía en corriente continua, y así no se podría usar directamente. El inversor solar tendría la labor de adecuar la onda y la frecuencia para hacer el cambio a corriente alterna, para que así se pudiese utilizar en cualquier domicilio.
Para que puedas tener una visión gráfica sobre lo que son los inversores solares: son elementos que se presentan con un tamaño de unos 50 cm x 70 cm / 40 cm x 60 cm (el tamaño dependerá también del modelo).
Características de los inversores fotovoltaicos
Los inversores solares deben cumplir con una serie de características:
- Potencia máxima que tienen capacidad de transformar: hablamos de la cantidad de energía total que puede transformar el sistema. Se puede medir en W o en WA. El usuario tendrá que elegir un inversor que se adapte a su tipo de instalación, considerando siempre que los inversores cuentan con unos márgenes con una seguridad mayor a la establecida.
- Protección: otra de las claves que deben cumplir los inversores es estar debidamente protegidos en caso de que se produzca un cortocircuito, o algún problema relacionado (por ejemplo, fallo de componente, caída de la red eléctrica, etc. En el caso de que la protección que ofrezca el inversor no sea suficiente, quizá deberíamos sopesar la opción de agregar un nuevo sistema adicional.
- Tipos: como ya vemos en los siguientes apartados, existen diferentes tipos de inversores solares que tendremos que elegir en base a nuestras pretensiones.
- Monitorización de datos: estaría bien generar datos para comprobar que paneles están produciendo menos de lo que deberían. Esto indicará que existe un problema, y podremos actuar ante ellos.
Cuando la instalación es realizada por un equipo técnico con experiencia no tendrás que preocuparte por investigar ninguna de estas características tú mismo. Desde Hogarsolar estudiaremos tu caso y los requisitos que debería cumplir el sistema para que te sea rentable.
Tipos de inversores solares
Antes de decidir qué tipo de inversor solar es el más adecuado, tu técnico deberá tener en cuenta varios factores, como qué tipo de tensión tienes en tu vivienda. Aquí podemos encontrar dos grandes tipos: monofásicos y trifásicos.
Monofásicos
Una instalación monofásica es aquella en la que tan solo existe una única corriente alterna o fase. Una instalación estándar funciona a 230V, pero es cierto que en algunas zonas todavía existen las instalaciones que funcionan a 1420V. Las instalaciones monofásicas suelen tener menos de 10 kW y son aquellas que se utilizan en los hogares que emplean electrodomésticos convencionales. Es el tipo de instalación más habitual que podemos encontrar en viviendas.
Trifásicos
Por otra parte, las instalaciones trifásicas están compuestas por tres fases o corrientes alternas que divide la instalación en 3 partes a las que llega potencia de manera continuada. Lo más común es que sus potencias se ajusten a los 400V.
Este tipo de instalación está más bien reservada a aquellas empresas o grandes industrias que emplean aparatos que tienen un consumo más bien elevado. En raros casos, estas instalaciones también se pueden encontrar en viviendas particulares, sobre todo si estamos hablando de una vivienda antigua o de una casa en la que hay equipos trifásicos, como podría ser una bomba de agua o una depuradora.
Bifásicas
Como curiosidad, en algunos lugares de España se realizaban instalaciones bifásicas, que son aquellas en las que se instalaban las 2 redes anteriores: una de 120 y otra de 120V (240V).
Pero es raro encontrarlas en la actualidad. Como ya hemos visto, la mayoría de las instalaciones son monofásicas y trabajan a los 230V.
Ahora ya sabes porqué son tan importantes los inversores solares, cuál es el papel de estos elementos en las instalaciones de paneles fotovoltaicos y porque hay que tenerlos en cuenta antes de decidirse por un sistema.